Guatemala se lo merece

Guatemala se merece su cielo, paisajes y costumbres. También su folclor, culturas, inclusión social, machismo y todos los diferentes feminismos. Sus remesas, índice de escolaridad, escuelas públicas y tarifas de colegios privados.

Muy merecido tiene también a su pueblo, lenguas y hora chapina. Sus insultos como “hijoesetentamilputas”, o si va con prisa un sintetizado “hijocienputas”.

Sus deportes, fútbol, equipos profesionales, clasicos y sele. Qué decir de sus chayeros, calles, futecas y campo marte. Y si hay Sky, pues su Barcelona y Real Madrid.

Por cierto, también se merece su expresión artística con sus artistas, obras, espacios, declaraciones y críticas. Su escena rock, bares, escuelas de música, industria, estaciones de radio y bandas.

No digamos sus gobiernos, partidos políticos, candidatos a presidencia, diputados, alcaldes, medios de comunicación, campañas y votantes.

Su narco actividad, sistema penitenciario, maras, policías, índice de violencia y porcentaje de asaltos por hora. Su miedo, desilusión, cansancio. Sus pocas miradas al cielo, las muchas al suelo.

Y como leí en un artículo hace cuatro años, si Guatemala no se lo merece, entonces, ¿por qué chingados lo tiene?