lunes, 30 de noviembre de 2009

Metallica – ¿tenés el álbum negro?


Como relaté en el anterior Metallicuento (sí, es un término pussy), lo que comenzó en 1989 con cuatro niños de 12 años, se llegó a multiplicar por decenas. En 1991 quien no tuviera el conocido como black álbum de Metallica… para qué jodidos. Todos lo teníamos, ya fuera traído de EEUU, versión centroamericana Dideca o grabado con fotocopia incluída del librito y las letras.

Cuando escribo “todos”, en verdad, es “todos”. Roqueros, raperos, fresas, salseros… nos había impresionado la canción de Enter Sandman, sabíamos de memoria la letra y cantábamos Sad but true, nos encantaba el vídeo de The Unforgiven aunque nadie lo entedió. Algunos hasta se hacían llamar así… en sus cartas firmaban como The Unforgiven… cool. Sabíamos los nombres de los cuatro integrantes mejor que las materias escolares. Soñábamos tener la actitud de James, tocar guitarra como Kirk, tener el pegue de Lars, vernos tan gruesos como Jason. También sabíamos la historia de Cliff… algo confundida, pero igual la comentábamos.

El mejor grupo de cheerleaders del colegio iniciaba su coreografía con Wherever I may roam, levantándose del suelo y girando la cabeza muy a lo Jason Newsted. En las kermeses no faltaban las playeras negras o chumpas con parches del grupo. Solo le empataba Guns N’ Roses.

Por ser colegio católico, los hermanos que nos predicaban insistían que esa música no era positiva, inclusive uno se animó a decir que era diabólica... más nos gustó escuchar el disco esa tarde.

E inclusive, se manejaba el rumor que tal vez ese año Metallica vendría a dar un concierto a Guatemala, en el Estadio Mateo Flores. (Sí, ha sido una laaarga espera).

Con Jorge nos gustaba mucho la canción My friend of misery… esa letra y ese bajo era impresionante. Y con Mauricio escuchamos como cien veces Nothing else matters en la tranquilidad de su casa intentando pasar los 14 años de edad sin tanto vergueo. No es una canción romántica, pero para dos adolescentes ese año, era perfecta para el mal de amores y la soledad. Un año después, Metallica y GN’R serían relevados por Nirvana y Pearl Jam como nuestros gurús. Nada mal el cambio, ¿eh?

7 comentarios:

Anónimo dijo...

muy malo el cambio de gurús al final en mi opinión

Prado dijo...

Me parece justa la crónica y adecuada a mi experiencia adolescente. Te recordás que Metallica y Guns hicieron una gira que terminó luego de una pelea y un incidente donde James, creo, se quemó? grueso. Luego Guns quiso hacer una gira con Nirvana pero no le gustó para nada la idea a Cobain. Qué tiempos aquellos, viendo el MTV, donde las noticias las daba Kurt Loder. Salud por los recuerdos.

iL Hell Dogma dijo...

tambien metallica fue de mis maximos, todavia hasta el reloaded tuvieron mi respeto aunque ya no admiracion.

despues de eso dieron el viejazo y no supieron lidiar con tecnologias nuevas y mucho menos supieron reinventarse.

Metallica murio a mediados de los 90's, lo que por ahi anda ahorita son unos viejitos cascarrabias que se dejaron llevar por el dinero y no por la esencia del rock.

David Lepe dijo...

Anónimo: ¿Tan malo estuvo?, no creo. Caval para la generación. Gracias.

Prado: Este patojo sí sabe. Simón, caval esos años. Un abrazo Julio.

iL Hell Dogma: Gracias por tu comentario. Pues algo así, solo te faltó "millonarios quejones". Pero el toque acá en Guate estará genial.
¿Vos los has ido a ver en sus visitas al DF?

Gabriela Penguelly dijo...

Ja, en el comentario anterior escribí "Sadman" en lugar de "Sandman", lo siento.

Me encanta escuchar cómo la gente adulta o algunos otros dicen que "esa música es del diablo", porque si es así, pues qué buen gusto tiene ese diablo; pero aun más me encanta ponerla a todo volumen y cantarla frente a ellos, demostrándoles que no me voy a ir al infierno por eso.

El grunge es genial, pero me sigo quedando con el venerable metal. Pero en definitiva, no es un mal cambio.

Saludos. =)

David Lepe dijo...

Navel: "Enter Sadman", pobrecito, que triste. El mismo bajista Trujillo cuenta que su abuelita le decía que el rock era del diablo... gracioso. Gracias.

Anónimo dijo...

Heyyyy mano que buen recuerdo, esas ocasiones de realmente disfrutar la musica pesada, de verdad nos disfrutamos tanto esa etapa, el feeling que habia en cada ocasion.

Jorge J