lunes, 31 de agosto de 2009

Historias de Chayán – Año nuevo de Consuelo (parte 3 y final)


Me limpié la boca mientras él se me acercaba directo a clavarme un patín. Le dije “mano, agarrá vuelo, a mí esa güisa de la Consuelo no me dijo que tenía novio”. El chavo se detuvo de repente, como confundido. Yo estaba arralado, porque aunque estaba más flaco y pequeño que yo, con esa furia bien me podía malmatar. Y yo no peleo, soy pura paz y amor, usted sabe, ya le he contado.

“Vos me querés ver cara de mula, yo vi que saliste del techo de esta casa, vergueado vas a salir pisado”, me dijo casi llorando de la cólera y me tiró una manada. Aterrizó en mi cuello, como me dolió. “TE DIGO QUE AGARRÉS LA ONDA VOS CHAYÁN, que la Consuelo no me dijo nada”, le grité. “Mi hermanito te vio que entraste acá mientras él quemaba cuetes”, respondió. A buena hora habla el mudito, pensé. No sabía qué hacer, si ponerme en guardia o huir. El tonto ese abría más los ojos, parecía poseído. “Mejor preguntemos”, me dijo y tocó el timbre de la casa de la Consuelo.

En eso, de lejos vi que venía mi amigo en el carro buscando la dirección. Yo salí corriendo y le grité asustadísimo “chayán, abrí la puerta y no apagués el carro”. El chavo salió corriendo atrás de mí. Mi amigo, gracias a Dios, me abrió la puerta y salimos al estilo ladrones, rechillando llantas. Lo dejamos atrás, llorando… maricón.

“Mirá Chayán, más te vale que hayás pasado la noche con una patoja bonita para aguantar todo este pleito”, me comentó mi amigo, siempre atento conmigo, buen cuate. Le conté que sí, que había sido con la Consuelo, pero que no me recordaba cómo paré ahí. Él no sabía quién era ella. “Bien, seguro estaba en la fiesta de Año Nuevo de anoche, es flaca, blanquita, con acné y tiene un grano grande en la nariz”, le expliqué. Mi amigo comenzó a reir a más no poder. “Ay mi Chayán, vos con quien pasaste la noche entonces, fue con la Alejandra, yo los vi medio acaramelados anoche, ella vive con su abuelita Doña Consuelo. Sabés quién es la Ale, es La Bruja, la de los chistes que contamos siempre, es que vos no la conocías, jaja, pasaste la noche embrujado Chayán”, concluyó.

“Pues órale, eso explica mucho”, recapacité mientras me sobaba el cuello, me dolía mucho. “Y te iba a matar a golpes su traido, El Gatío, que es bien débil y delicado”, agregó. Puchis, eso me dolió más.

Para saber quién es Chayán, ver el post Chayán, el peluquero cuenta-historias

jueves, 27 de agosto de 2009

Historias de Chayán – Año nuevo de Consuelo (parte 2)


Conté hasta diez y comencé a tocarle el hombro a esa medio bella durmiente. “Sht, usted, ¿está despierta?” Le decía al oído, pero con un brazo cubriéndome la cara, por si tiraba una manada. No se despertaba. “Consuelo, Consi, Consi despierte”, le repetía. Entonces decidí poner música a todo volumen para despertarla. Encontré solo un caset, decía escrito a mano “Fantasmas del Carive”… íjoles, hasta yo sé que “Carive” no se escribe así. Puntos menos. Aguante…. Jaja.

Le di play y sonó esa cosa, ah, música tan fea. Se despertó de golpe. “Puta usted, apague esa mierda”, me dijo. Ah no, no puede ser mi novia, pensé, a mí no me gustan las mujeres que dicen malas palabras. Apagué a los Fantasmas. “Hola Consuelo, buenos días, ¿qué tal está?”, le dije. Ella se comenzó a reir, pura loquita, y me vio. “¿Ya hasta se vistió usted?”, me preguntó. Yo le conté que tenía un compromiso familiar y que la llamaba más tarde, puras mentiras, entonces necesitaba la dirección de su casa y un teléfono para que un mi amigo me fuera a traer.

Me dio la dirección y fui a buscar el teléfono a la sala, y no lo encontraba. Porque ya va que en esos tiempos teníamos celular, já, si eran carísimo, solo los doctores o millonarios tenían. Encontré el teléfono y llamé a un mi amigo que era evangélico, así seguro no había chupado la noche anterior y podía ir a traerme. “Vos chayán, vení a traerme, te pago la gasolina”, le dije y le di la dirección. Llegaría en 15 minutos, porque los primeros de enero no hay tráfico.

Entonces regresé al cuarto “adiós Consuelo, ahí la llamo pues”, le dije saliendo del cuarto. Ella se carcajeó. No entendí. Volví a salir por el techo. Estaba en la calle, seguía con el dolor de cabeza, cuando se me acercó un chavo, todo desnutrido, pero con los ojos rojos y llorosos. Me empujó. Casi me bota. "Vos chayán agarrá onda", le dije.

“Vos saliste de esta casa, ¿te cogiste a mi novia anoche?”, me preguntó. El estómago no aguantó más y guaquié, ahí mismo en la calle. Ay, qué manera de comenzar el año.

(Continuará).

Para saber quién es Chayán, ver el post Chayán, el peluquero cuenta-historias

lunes, 24 de agosto de 2009

Historias de Chayán – Año nuevo de Consuelo (parte 1)


Cuando era más chavo, para un año nuevo, no mira que me desperté en un cuarto que no conocía y con un gran dolor de cabeza. Miraba para todos lados y no reconocía nada. Miré a la chava dormida a mi lado, y nada, no tenía ni idea quién era. Y no estaba tan fea, tenía granitos en la cara, uno más grande en la nariz, pero pues, espero haberla pasado bien. Usted me entiende.

Entonces me levanté y me vestí con cuidado de no hacer tanto ruido. El estómago me hacía shrucu shrucu. ¿Por qué bebí tanto? Quería salir de la casa, pero la puerta de enfrente estaba con llave. Así que abrí la trasera, me subí al techo y bajé por la pared del jardín. “Al fin, libre”, pensé.

Comencé a caminar, pero tampoco conocía las casas o las calles. Llevaba como tres cuadras cuando me asusté, porque no había ni un alma afuera. Y de la goma, me dieron ganas de echar el guacamol. Eran ya como las 9 de la mañana. Me asusté, así que decidí regresar a la casa. En el camino me encontré con un niño que estaba quemando cuetes. Pero como que era mudo, porque no me hablaba. Yo va de preguntarle "Vos chayán, ¿qué zona es esta? ¿cómo se llama la colonia?". No mira que el patojito no me respondía, solo me miraba, con los ojos como perdidos. Me di por vencido y regresé a la casa.

Me encaramé en la pared del jardín, subí al techo y entré por la misma puerta trasera que había dejado abierta. En esa época no era tan peligroso como ahora. Antes de despertar a la chava, comencé a buscar algo con su nombre en la sala, porque qué clavo. Encontré una tarjeta de navidad, “Feliz Navidad, tía Consuelo”. Perfecto, ya sabía su nombre, Consuelo, ala, “qué nombre tan feo, parece nombre de viejita”, pensé. Jaja, que risa, ¿verdad? Pues vaya manera de consolarme. Jaja, ¿Me entiende? ¿Consuelo, consolarme?

A punto estaba de despertarla, cuando me asusté otra vez, porque ¿y si se enojaba? ¿y si no se acordaba de mí y pensaba que era un ratero? ¿y si ya nos habíamos hecho novios? Hasta más ganas de guaquear me dieron otra vez.

(Continuará).

Para saber quién es Chayán, ver el post Chayán, el peluquero cuenta-historias

sábado, 22 de agosto de 2009

Avatar – se nos viene algo espectacular


Tuve la oportunidad de asistir a la proyección de 24 minutos de la película Avatar, lo nuevo de James Cameron (director de Terminator 1 y 2, y Titanic). Esta actividad se realizó en muchos países que tienen salas especiales para 3D, y oh Dios, Guatemala tiene una.

El estilo de promoción es bastante peculiar. Al ser un filme para verlo en 3D, pues sacar solamente un trailer para televisión o Internet no es tan impactante, porque lo más llamativo son las imágenes en 3D que maneja la película.

En lo visual, podremos disfrutar de paisajes inimaginables, criaturas salvajes únicas y personajes que muestran acabados y matices trabajados a la perfección. Habrá muchas secuencias de acción y aventura.

Según entendí, Avatar tiene lugar en el futuro, cuando terrestres descubren un planeta con características muy parecidas a las de La Tierra. Deciden visitarlo, estudiarlo o conquistarlo, no está claro. Los seres más parecidos a los humanos, son una especie de aborígenes, quienes son delgados y fuertes, miden más de dos metros, piel color azul, ojos grandes y verdes. Ah sí, y tienen cola. Así que los astronautas tendrán que pasar por un proceso químico para convertirse en uno de estos, y mezclarse con facilidad.

Eso sí, la historia será muy agringada, pero creo que es el comienzo de algo especial. Se estrenará en diciembre. Ya era hora, que lo mejor de la tecnología cayera en las manos adecuadas.

Ver trailer de Avatar.

jueves, 20 de agosto de 2009

“Debiste haber tenido una farmacia”


Cuando vi Wild Man Blues, documental que persigue al director de cine Woody Allen junto a su banda de jazz, entendí que yo nunca quedaría bien con todos, por más que mis actos fueran con buena fe. En esta obra se muestra como el cineasta toca el clarinete y su banda lo invita a participar con ellos en una pequeña gira europea. Él se les une muy ilusionado. Los primeros conciertos son toda una fiesta, tanto que una noche se quedan sin energía eléctrica, pero ellos siguen tocando y el show continúa iluminado con candelas.

Como en ese continente las películas de Allen son tan populares, se corre la voz que él y su banda está de gira, así que la serie de conciertos se alarga casi el doble. Lo que inició como una divertida aventura, se convirtió en un deber cansado y obligatorio. Estresante. Él termina la gira exhausto y de mal humor.

Y lo mejor es cuando regresa a Nueva York y visita a sus padres. Su progenitor le reclama de por qué él no trabajó en una farmacia, como siempre soñó. “Papá, me convertí en un cineasta conocido a nivel mundial, me encanta el jazz y toco el clarinete como hobby porque me puedo dar el lujo”, le dice Allen.

“Debiste haber tenido una farmacia”, le responde su padre. En ese momento cayó como yunque en mi cabeza, la idea de que yo nunca quedaré bien con mi padre, mi madre, hermanos, amigos, novias, desconocidos, jefes y colegas. Ahora bien, si ya lo había entendido, ¿por qué putas lo vuelvo a olvidar?

lunes, 17 de agosto de 2009

Chayán, el peluquero cuenta-historias


Chayán ha sido mi peluquero desde hace más de 10 años. Él me cortaba el estilo hongo, cuando lo tuve largo me quitaba las puntas y ahora me rapa; y siempre he salido sorprendido o contento.

De los detalles que más me gustan de aquel, es que pone música según los gustos del cliente y si entra en ambiente, hasta canta. Cuando es mi turno, pone sus cds de música rock ochentera y noventera en inglés, con la curiosidad de que no sabe hablar ese idioma. Así que, frases como “Aivi guachillú”, terminan siendo “I´ll be watching you”, de Every breath you take. “Intsismail serressenchomí”, es “She got a smile that seems to me”, de Sweet child o’ mine… creo que ya tienen la idea. Y cuando son bailables, no es extraño ver un par de pasos o vueltas a lo Michael Jackson o MC Hammer.

Y ¿por qué le dicen Chayán? Pues porque en vez de llamar a alguien por “vos chato”, “usted chavo” o “vos patojo”, él de manera original les dice “vos chayán”. Y cuenta la leyenda que su ídolo de joven fue el cantante potorro Chayanne. Además, tuvo por varios años un poster gigante del boricua en su barbería.

Esto me lleva a contar que lo mejor de él, son sus historias. Desde anécdotas hasta chismes, sus relatos son de lo más interesantes. Son tan extraños, que terminan siendo irreales, y a la vez creíbles. Poco a poco iré recordando mis cuentos favoritos e intentaré compartirlos en este blog con el mismo lenguaje chayanesco. Por hoy, solo los dejo con una pincelada de su talento.

“Estoy bien, por la gracia de Dios. Tengo un dolor de garganta bien fuerte, creo que tengo una chibola, no sé que es, pero me molesta. No me deja dormir, en las noches me la quisiera sacar con una tijera, pero no puedo. Hasta tragar comida me cuesta, hoy no comí por eso. Podría ser cáncer... Y no puedo ir al doctor porque no tengo dinero, menos para las medicinas. Estoy atrasadísimo con la renta del local. Pero quitando eso, estoy bien, por la gracia de Dios.”

viernes, 14 de agosto de 2009

The Wrestler – más vale tarde que nunca


Un año después de haber visto por primera vez el trailer, después de tres copias pirata compradas y que salieron defectuosas, después de varias pláticas valiosas y algunas lágrimas; se estrena hoy viernes en Guatemala The Wrestler (El Luchador), una de mis películas favoritas de los últimos años.

La tragedia de un héroe en picada, de los lados injustos de la decadencia, de la eterna búsqueda de la felicidad… ¿qué felicidad? Mejor dicho una búsqueda de retazos de dignidad. Se trata de un luchador quien fue una gran estrella en la década de los ochenta, pero por X, Y y Z razones, ahora participa en peleas clase B, vive en una pequeña casa humilde y la mayoría de su dinero se lo gasta en medicina para el dolor de cuerpo. No tiene familia, no tiene amigos. La lucha libre es lo único que tiene y le queda. Este filme afecta, afecta en verdad.

Así que, si están con ánimos de ver una gran película, un gran drama, una gran actuación de Mickey Rourke, vayan este fin de semana al cine. No se arrepentirán.

Ver tráiler de The Wrestler.

miércoles, 12 de agosto de 2009

Mis 7 freakeadas


No me considero un freak al estilo Villacinda, el Pato, Lunatika, Paula, Wendy (y hermanas), Mafer, Cecy (quien no sos wannabe, mija, no), Selene… tal vez me haga falta una bufanda. Tampoco soy uno a lo Stanley, Jorge, Gabriel, Allan, Prado, Gaby, o Jess… necesitaría más malicia. Menos puedo lograr ser un freak como el Verde, Paco, Juan Pablo, André, Alejos o Morena… ese nivel es casi inalcanzable (lo bueno es que son creativos los jóvenes).

Pero que tengo mis excentricidades, por Dios, las tengo. Hace 5 años tenía algunas manías terribles, pero las dejé. Por ejemplo, no podía fumar un cigarro que alguien más encendiera, debía hacerlo yo mismo. También guardaba todas mis entradas de conciertos e idas al cine, y atrás escribía un pequeño comentario, la calificaba de 0 a 10 puntos, anotaba la fecha y el nombre de mi acompañante.

Gracias a El Vigilante he hecho este ejercicio de buscar mis 7 freakeadas, y debido a un post de Noticias para dios me atrevo a publicarlo. Aquí les van las siete que más me gustan (o las que les quiero compartir). Y mala onda quien me deje de hablar después de haberlas leído.

1. Cuando preparo maletas para un viaje, lo hago exactamente como Jack Nicholson en As good as it gets.

2. Todavía visto al trabajo mis kickers, zapatos que compré hace 7 años. Por más que defiendo su comodidad y funcionalidad, la verdad acepto están hechos caca.

3. Llevo desde hace más de 10 años una relación sentimental imaginaria con la actriz Natalie Portman. Ojo, no quiere decir que hayamos sido novios todo el tiempo, hemos tenido nuestros momentos. Eso sí, en estos días andamos negociando un regreso, porque ya me estoy separando de Michell Branch, con quien vivimos juntos algunos años y tuvimos una hermosa hija llamada Tera (ella escogió el nombre).

4. Me encanta comer magdalena o pan dulce con frijoles. Mmm, que rico.

5. Prefiero quedarme con la entrada al cine comprada, que entrar con la película ya comenzada. Aunque últimamente la crisis me ha hecho violar mi creencia.

6. No me gusta La vida es bella. Lo he intentado, la he visto varias veces, pero no me convence. Lo siento. Es más, hasta me cae mal la película pisada.

7. Últimamente, me he imaginado como el quinto miembro de Kudai.

Por favor, no llamen a la ambulancia, no es un caso grave.

lunes, 10 de agosto de 2009

¿Por qué NO DEBO VER Charm School: Rock of Love Girls?


Si no estás al tanto, Rock of Love fue un programa de televisión donde varias señoritas, muy guapas y bien dotadas, se pelearon por ser la pareja sentimental del cantante de Poison, Brett Michaels. Yo no me perdí ni un episodio. Ahora, estas féminas, cuyas profesiones van desde modelos, bailarinas, actrices y “fans roqueras”, compiten en Charm School: Rock of Love Girls, una escuela de modales donde la ganadora se llevará $100 mil. Todo esto en formato reality show y creado por VH1.

Yo ya había prometido abstenerme de ver otro reality, por muchas razones. Pero la semana pasada que encontré el primer episodio de Charm School: Rock of Love Girls, me lo disfruté enterito.

Por esto, realizo una lista de 3 poderosas razones por las que NO DEBO VER este show.

1. El tiempo es oro. Tengo tantos libros a la mitad (me da miedo que por cuestiones patológicas no los termine) y películas recomendadas en espera como Milk, Doubt y Frozen river, que bien podría adelantar en esto.
2. Higiene espacial. Mi habitación está hecha pedazos. Tengo meses de no limpiarla. Podría tomar una hora a la semana e ir arreglando poco a poco.
3. Higiene mental. Estos espectáculos tan quemados, no creo que alimenten mi cerebro en ningún caso. Peor aún, siento que más me joden la cabeza.

Estas son mis razones, muy fuertes. Así que… bueno… pensándolo bien… ¿qué es una hora semanal de atrofio cerebral? Charm School: Rock of Love Girls, los martes a las 9 de la noche. Espero le vaya bien a Brandi M. (la de la foto), mi favorita, aunque no le tengo mucha fe porque ya he visto un par de imágenes suyas llorando... pobrecita.

viernes, 7 de agosto de 2009

Parece que he visto los blockbuster veraniegos equivocados


Desde el año pasado me han atraído las películas de verano, esas de efectos especiales desorbitantes, mucha acción y aventuras fuera de serie. Este año no he podido ir al cine con la frecuencia deseada, pero he podido ver algunas blockbuster que me han decepcionado o me he sentido timado.

Empezando por Wolverine: Origins, toda una oportunidad perdida de contar la historia de uno de los personajes de comic más carismáticos y oscuros que existe. Parecía más cowboy que mutante. Luego Terminator Salvation, total guácalas, una horripilante ciencia ficción. También Transformers: revenge of The Fallen, todo un show de juegos pirotécnicos, pero demasiado imbécil. Termino con G.I. Joe: rise of Cobra, y sus efectos de caricatura análoga. Se les unen las tachadas desde hace meses como “las que no iba a perder mi poco y preciado tiempo y dinero”: Ángeles y demonios, La propuesta, Noche en el museo 2 y Bruno.

De las pocas que pude ver, se salva La era del hielo 3, la cual le perdono que muchas secuencias graciosas ya salieron en otras películas, pero hicieron una buena ensalada de copias.

Y Harry Potter y el misterio del príncipe, que me entretuvo, me divirtió, me emocionó y me alegró haberla entendido sin tener que estar preguntando “¿y ese es bueno o malo?” o “¿cuál era ese truco?” cada diez minutos. Sus dramas teenager de esta entrega son tan intensos que ya esperaba saliera el mismísimo elenco de Dawson’s Greek o Beverly Hills 90210, pero no le quita el mérito de haberme gustado.

Parece que se me pasaron las que merecían la pena. Viaje a las estrellas no la vi, y dicen que no está nada mal. Y para Up aposté del todo por el todo… o la disfrutaba en 3D o nada. Me quedé en cero, y es otra que me han recomendado por todos lados.

Ni modo, ahora a esperar los dvds de las pendientes y que vengan al cine en estos próximos meses The Hangover y I love you, man. Muchos me han dicho "¿y quién te manda a ver estas películas?", y lo les contesto que nadie, absolutamente nadie.

lunes, 3 de agosto de 2009

La lista y la bruta Def Leppard


Las baladas de Def Leppard me gustan. No hay duda. Tengo ya más de 20 años de escucharlas. Muchas de ellas tienen el sentimiento melancólico de recordarme a mis enamoradas de colegio (léase bien, “enamorada” no significa “conecte exitoso”), y otras llevan a mi memoria a mis amores platónicos de adolescencia y unas más hasta la fecha.

Ninguna de mis parejas ha sido fan de este grupo. Solo con una novia tuve la iniciativa de mostrarle unas canciones. Su veredicto fue “que fresas, ¿eso te gusta?”, y eso que ni me animé a enseñarle una foto de ellos, quienes jóvenes parecían unos Backstreet Boys greñudos, con delineador.

Las canciones en sí, son buenas. Frases inteligentes, acordes pegajozos, solos de guitarra atractivos y gritos del cantante con feeling mucho feeling. Hay unas rolas muy quemadas, como las de los tiempos de Hysteria y Adrenalize (1988 al 1992), pero otras han pasado desapercibidas.

Por ello, para este mes La lista y la bruta será de baladas de los Def Leps. No sé si es nostalgia o que mi corazón estos días late suave, como nuevo, pero llevo semanas escuchando mi discografía de estos ingleses.

Algunas de mis frases favoritas:
“Hay cosas que debo decirte, pero las palabras se interponen”, de All I want is everything.
“Vivir es la mejor venganza que puedes realizar”, de Blood runs cold.
“Cuando haces el amor ¿te ves en el espejo? ¿En quién piensas? ¿se parece a mí?”, de Love bites.
“Amar es fácil, pero no es fácil retirarse, y mantener la fe de que existe una razón”, de Miss you in a hearbeat.
“Nosotros, siempre fue la mejor parte de mí”, de Long long way to go.

Long live Def Leppard.

Hysteria en vivo, con ayuda de la lindísima Taylor Swift.